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Escritores vs. Copywriters

holaaa

Hace tiempo vi un anuncio de la campaña Live True hecha por Dewar’s en 2013 cuyo copy me pareció increíble. Lo primero que pensé fue: “chapó por el copywriter”. Me encantó lo que decía y como lo decía, que se me ponen los pelos de punta cada vez lo escucho

Me puse a investigar quién era ese “copywriter” por curiosidad y me di cuenta que no era un copywriter, sino un escritor, Charles Bukowski. El texto del anuncio es un poema que escribió Bukowski titulado ¿Así que quieres ser escritor? Es un poema muy visceral y sincero sobre el oficio del escritor, solo que Dewar’s lo ha aplicado a todos los ámbitos de la vida, como un leitmotiv.

Pero el texto de Bukowski no es el primero que se ha utilizado en el mundo de la publicidad para dar voz al concepto. Otro ejemplo sería un famoso texto de genial escritor Julio Cortázar. En 2007 SEAT para promocionar el SEAT León utilizó el cuento de Cortázar llamado Preámbulo a las instrucciones para dar cuerda al reloj, que pertence al libro Historias de cronopios y de famas (1962).

 

https://www.youtube.com/watch?v=rpNRYF0CUuE


Me parece curioso como a veces se recurre a las palabras del escritor frente a las de un copywriter, quizá tenga ver con el hecho de que un escritor no es un redactor publicitario sino un ingeniero de historias, que habla desde las entrañas como dice el texto de Bukoski. O quizás no, juzgad vosotros mismo. A continuación dejo los textos.

Si a pesar de todo
no sale de ti como una explosión
no lo hagas
al menos que salga, sin reclamarlo,
de tu corazón, tu mente, tu boca
y tus vísceras
no lo hagas
si tienes que sentarte horas
mirando fijamente el monitor
o encorvado sobre
tu máquina de escribir
buscando palabras
no lo hagas
si es por dinero
o por fama
no lo hagas
si es porque deseas
mujeres en tu cama
no lo hagas
si tienes que sentarte
y editarlo una y otra vez
no lo hagas
si pretendes escribir como alguien olvídalo
si tienes que esperar que salga como
un rugido
entonces espera pacientemente
si nunca sale de ti como un rugido
dedícate a otra cosa
si primero se lo lees a tu esposa
a tu novia o novio
a tus padres o a quién sea
no estás listo
no seas como tantos escritores
no seas como miles de personas
que se dicen escritores
no seas aburrido, fastidioso y engreído
que no te consuma el amor propio
las librerías del mundo
duermen en sus bostezos
por tipos como tú
no te incluyas allí
a no ser que salga de ti
como un cohete
a no ser que tu letargo
te arrastre a la locura
al suicidio o al asesinato
no lo hagas
a no ser que el sol que llevas dentro
te queme las entrañas
no lo hagas
cuando llegue el momento de verdad
y seas elegido
eso aparecerá por sí mismo
y así continuará
hasta que mueras o fenezca dentro de ti
no hay otro camino
y nunca lo hubo.
Charles Bukowski
(¿Así que quieres ser escritor?)

Piensa en esto: cuando te regalan un reloj te regalan un pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire. No te dan solamente el reloj, que los cumplas muy felices y esperamos que te dure porque es de buena marca, suizo con áncora de rubíes; no te regalan solamente ese menudo picapedrero que te atarás a la muñeca y pasearás contigo. Te regalan —no lo saben, lo terrible es que no lo saben—, te regalan un nuevo pedazo frágil y precario de ti mismo, algo que es tuyo pero no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca. Te regalan la necesidad de darle cuerda todos los días, la obligación de darle cuerda para que siga siendo un reloj; te regalan la obsesión de atender a la hora exacta en las vitrinas de las joyerías, en el anuncio por la radio, en el servicio telefónico. Te regalan el miedo de perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa. Te regalan su marca, y la seguridad de que es una marca mejor que las otras, te regalan la tendencia de comparar tu reloj con los demás relojes. No te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj.